Por Carmen Soto
investigadora del Centro CREAS

Las papas son uno de los alimentos más consumidos a nivel mundial junto con el arroz y los cereales. Dentro de sus características, las papas son una importante fuente de carbohidratos, especialmente almidón; proteínas; minerales como hierro, calcio, fósforo y potasio; y de vitaminas C y B6. , vitamina B6 y potasio. Es un alimento fácil de preparar, requiriendo de una simple cocción, y es considerado un alimento básico y económico.

Sin embargo, en los últimos días a nivel nacional se ha visto un incremento en el costo de diversas hortalizas, incluyendo las papas, promovido por las variaciones climáticas y el efecto que los distintos episodios de lluvia y temporal han generado sobre la agricultura nacional, donde a la fecha se han perdido sobre 20 mil hectáreas de cultivos de hortalizas. Si bien en el caso de las papas su cultivo se produce entre fines de septiembre y noviembre, la incertidumbre ante eventuales nuevos eventos climáticos ha generado un incremento de hasta un 400% en su valor comercial.

Considerando que el consumo de papa a nivel nacional supera los 35 kg por persona cada año, este aumento en el costo afecta notablemente el presupuesto de los hogares chilenos, por lo que es necesario buscar alternativas que permitan alimentarnos y suplir esa importante fuente de energía y de micronutrientes.

En ese aspecto debemos considerar el consumo de arroz, que presenta un nivel de carbohidratos similar al de las papas, y que además es una buena fuente de proteínas y vitaminas como la niacina, riboflavina, ácido fólico, y es capaz de aportar vitamina D y en menor medida ácidos grasos del tipo omega 3; por otro lado, se encuentran cereales como el trigo, que puede ser consumido en la forma de cous -cous o en pastas, y que posee cerca de un 60% de almidón, además de vitamina B, y micronutrientes como magnesio, fósforo y zinc, y pudiendo ser una fuente de fibra ante consumo del producto integral; además existen otros cereales y pseudocereales que han aumentado su consumo en los últimos años y que pueden ser un importante aporte de macro y micronutrientes, además de ser bastante apetecibles, tales como el amaranto, la quinoa y el trigo sarraceno. Estos últimos, tienen la ventaja, además, de poder ser consumidos por la población celiaca e intolerante al gluten, dado que no contienen este tipo de proteínas, constituyéndose como una ventaja por sobre cereales como el trigo y la cebada. Adicionalmente los tres son importantes fuentes de proteínas, que en su estructura incluye todos aminoácidos esenciales – los que no pueden ser producidos por el organismo y deben ser consumidos a través de la dieta; además poseen carbohidratos; y son una de las fuentes vegetales más importantes minerales, como calcio, hierro y fósforo, y de vitaminas como vitamina A, C, B1, B2, B3, ácido fólico, niacina, entre otras.

De esta manera, si bien la papa es un producto rico y versátil, la naturaleza nos entrega múltiples alternativas nutritivas y apetecibles para poder acompañar nuestros platos ante el efecto que el costo de las hortalizas ha generado en nuestros bolsillos.